1.- Cada miembro tiene derecho a voto, a comida y a bebida por igual, y tiene derecho a hacer con ellos lo que le plazca, excepto en periodos de escasez o si se estipula lo contrario por causas mayores.

2.- El botín se reparte uno a uno por lista, excepto si se conoce de alguien que ha defraudado o ha engañado.

3.-La tripulación es una hermandad. Lo que ocurre dentro, se queda dentro.

4.- Es mandatorio tener las armas siempre listas para el combate.

5.-Si la tripulación lucha como uno, ningún miembro podrá escabullirse de la pelea.

6.- Si alguien desea abandonar la tripulación para marcharse a otra, deberá abonar una cantidad de dinero al capitán (usada para contratar a otro bucanero que ocupe su lugar) o en su defecto, vencer en duelo a sable al miembro de la tripulación que se escoja democráticamente (o se preste voluntario).

7.- Las disputas entre miembros de una misma tripulación se batirán en duelo justo.

8.- Cada miembro de la tripulación tiene derechos y responsabilidades específicas. Si se evaden las responsabilidades, el capitán aplicará el castigo que crea oportuno o le revocará algún derecho temporalmente, dependiendo de la gravedad.

9.- Las promesas, tanto en mar como en tierra, se sellan con una mano sobre la botella y la otra sobre el arma de preferencia. Tras eso, se sellará con sangre, ambos haciéndose un corte
en la mano y dándosela. Esta última parte se puede sustituir por un escupitajo si alguna de
ambas partes ha contraído alguna enfermedad peligrosa. Si la promesa es sobre la tripulación o el barco, el capitán será el encargado de sellarla.

10.- El capitán se elegirá mediante votaciones. Se puede convocar una nueva elección si la
mitad más una persona están a favor de ello. En este caso se procederá a la votación y el
nuevo elegido (el cual debe estar de acuerdo con ser el nuevo capitán), deberá batirse en
duelo con el que antes ostentaba el puesto. Quien gane será el capitán de la tripulación.

11.- A no ser que se incumpla alguna de estas normas (o se dé el caso alguna traición o intento de ello), la norma más importante es “Ningún hombre queda atrás”.